Por:Misael Habana de los Santos.

 

No, no es Santa Claus. No, no es Gaspar, ni Melchor, mucho menos Baltazar.

 

Pero como los anteriores personajes de ficción, el ex rector de la UAGRO Javier Saldaña, ahora en activa campaña política con Morena y cerca al senador Félix Salgado Macedonio, como ayer lo hizo con el PRI al lado del entonces gobernador Héctor Astudillo, busca los aparadores, ocupa los espacios masivos al encuentro de poténciales electores, ya sea un jaripeo o festival infantil. Poco importa, el medio es el mensaje.

 

El ex rector repartió dulces entre los niños a lo largo y ancho del lugar donde la gobernadora Evelyn Salgado Pineda dió el banderazo al llamado pomposamente “World Holiday Parade”. Actividad también realizada por los animadores del festival de Día de Reyes.

 

Horas después a través de las redes sociales posteó enviando la verdadera intención del mensaje:

 

“Mi gratitud y agradecimiento a todas y todos los universitarios que contribuyeron con su tiempo, con su aporte, con su esfuerzo y con su amor en la participación del desfile de globos gigantes “World Holiday Parade”. “

 

Y para no dejar dudas de su evangelio pedagógico a su paso por la considerada “máxima Casa de Estudios de Guerrero”, Saldaña Almazán, festejó la consumación de los objetivos al trazar el perfil del egresado de la UAGro durante su rectorado.

 

 

“Esta nueva generación de universitarios que me ha tocado formar y unir en los últimos 17 años, son universitarios solidarios, buenos ciudadanos, buenos profesionistas y humanistas. Es así como los quiere Guerrero en las calles pero poniendo nuestras capacidades y amor al servicio de los guerrerenses quiénes hacen posible que exista nuestra Alma Mater.”

 

Los universitarios a los que hacía referencia el ex rector y político habían estado en el Parade paseando y sosteniendo globos gigantes o repartiendo dulces durante el festival infantil en la costera.

 

Por ese trabajo Saldaña, a través de una plataforma virtual, bendijo y apapachó a la comunidad que lo sigue como a un profeta en tierra de infieles bajo la promesa de “Que lo mejor está por venir”: “Que Dios les bendiga, les multiplique y les de más cariño y amor en sus hogares.”

 

Horas antes las estrellas de plástico inflado habían cubierto por momentos los espacios del cielo azul acapulqueño haciendo la felicidad que provoca el circo entre los niños y los papás de los niños.