ACAPULCO, Gro., 5 de noviembre de 2020.- El Hospital General del puerto se convirtió prácticamente en un tianguis, debido a la invasión de puestos semifijos.

Comerciantes justificaron esta acción debido a que no han recibido ayuda de las autoridades por la pandemia de Covid 19.

En un recorrido en el hospital que se ubica en el poblado El Quemado tras las denuncias de seguidores de Quadratín Guerrero, se observó que afuera de la entrada de la institución y parte del estacionamiento se encuentran instalados varios puestos que van desde comida hasta papelería y venta de ropa.

Se trata de vendedores constituidos de la organización Unión de Comerciantes Guerrerenses, quienes venden en el mercado La Esperanza que se encuentra en El Quemado.

Debido a la pandemia y las bajas ventas, tuvieron la necesidad de bajar al hospital e instalarse en esa zona para captar a las personas que todos los días entran y salen del hospital.

La comerciante, quien se identificó como Aida, dijo que son 130 vendedores los que se tienen que rotar para poder vender afuera del hospital.

Justificó que a pesar de que metieron solicitudes al gobierno para que pudieran recibir ayuda económica durante la pandemia, no tuvieron respuesta alguna y eso por eso que tomaron la determinación de vender ahí.

Denunció que otro grupo de comerciantes que se colocó a un lado del hospital, liderados por una mujer que no conocen, los han amenazado para que se quiten y ellos puedan ocupar el lugar.

Los vendedores ofrecen servicio de misceláneas, venta de comida como guisados y tacos, ropa. Además de medicamentos, aunque según dijeron, sólo muestran las cajas vacías y al solicitar un producto en específico tienen que ir por él hasta la farmacia.

Los comerciantes solicitaron a las autoridades que volteen a ver a los de la zona rural para que los puedan apoyar durante la pandemia.

Mientras que en los puestos instalados por parte del otro grupo de comerciantes, se pudo observar una farmacia más establecida, con estanterías, y hasta una copiadora.

Fuente: Quadratín Guerrero