ACAPULCO, Gro., 5 de mayo de 2024.- Los obispos de la entidad y el arzobispo del puerto, rechazaron todo acto de violencia contra la dignidad, los derechos y la vida del obispo emérito, Salvador Rangel, así como de toda persona, luego de las versiones del gobierno de Morelos en torno al caso de su desaparición.
En un comunicado el arzobispo de Acapulco, Leopoldo González González y los obispos de las diócesis de Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González Hernández; de Ciudad Altamirano, Joel Campos Gorostieta; y el de Tlapa, Dagoberto Sosa Arriaga, manifestaron su cercanía y aprecio al prelado, de quien reconocieron su compromiso y entrega para no dejar indefensas a las comunidades de sus diócesis ante las violencias, corriendo riesgos y peligros.
“Confiamos y esperamos que los diversos niveles de gobierno y procuración de justicia intervendrán para esclarecer los hechos y proceder conforme a derecho”, indica el texto signado por los cuatro líderes de la Iglesia católica en Guerrero.
“Saludamos con afecto a todas aquellas personas e instituciones que han manifestado su solidaridad con la oración, la información, el cuidado médico o los procedimientos legales, en torno a la violencia sufrida por nuestro querido hermano, Monseñor Salvador Rangel Mendoza, obispo emérito de la diócesis de Chilpancingo-Chilapa”, dicta el texto.
Como informó Quadratín Guerrero, el obispo emérito estuvo desaparecido desde el sábado 27 de abril y fue localizado con vida dos días después en un hospital del estado de Morelos.
Posteriormente, el fiscal de esa entidad, Uriel Carmona dijo que Rangel Mendoza habría sido víctima de un secuestro exprés y su abogado Pedro Martínez Bello, acusó que el obispo emérito fue drogado y víctima de robo, ya que vaciaron sus cuentas bancarias.
La Policía filtró que el líder religioso fue encontrado en un motel con viagra y un examen toxicológico arrojó que habría consumido benzodiacepina, un medicamento psicotrópico que es utilizado para tener efectos sedantes.
Más tarde, el comisionado estatal de Seguridad Pública de Morelos, José Ortiz Guarneros chocó con la versión del fiscal Uriel Carmona y negó que Salvador Rangel haya sido secuestrado, ya que cámaras de seguridad muestran que ingresó al motel Real Ocotepec a pie, junto a un hombre.