Adela Román es un mal chiste

Por Alfonso Juárez

Acapulco. – La intentona de reelegirse a la alcaldía por parte de Adela Román Ocampo es un chiste y mal contado.

Para los que vivimos en Acapulco podemos dar testimonio que su gobierno -al cual llegó de chiripa y sin méritos propios- fue tan fugaz e inocuo que no hay una sola cosa por la cual se le pueda recordar.

Corrijo, será recordada por su ineptitud y falta de resultados.

Llegó con el estandarte de MORENA de No mentir, No robar y un largo etcétera, pero la realidad es otra, sus familiares y amigos hicieron de las suyas, de principio y de un tan ansiado fin.

Es una de las peores administradoras del Acapulco moderno, si no, insisto, salga a las calles. Dé usted un vistazo.

No hay política pública, todo es un refrito de lo que dicte y mande el gobierno federal, pero la diferencia es que acá no hay recursos, no hay bolsillo, no hay dinero pues.

La deuda que dejará a la siguiente administración será un boquete financiero difícil de cubrir.

De por sí Evodio Velázquez Aguirre -otro sin cara que busca hueso- le dejó un paquetito.

Por cierto, nunca hizo nada por exhibir el desaseo financiero del perredista, puro de dicho, nada de hecho.

Está apurada por querer cubrir sus rastros de las cifras en rojo. Desesperada por cubrir sus malos manejos.

Allá de aquellos que decidan volver a elegir.

 

Marejadas: 

Aguzados los de la chiquillada de políticos que pretenden ir por MORENA a la caza de la alcaldía de Acapulco.

En su última visita a Guerrero, el Presidente Andrés Manuel López Obrador preguntó por un personaje que tiene más experiencia y resultados que todos los neomorenistas juntos.

Se la sabe de la A a la Z.

Fue compañero y aliado de AMLO cuando iniciaban juntos lo que ahora denominan 4 transformación. Ambos se conocen bien.

Tiempo al tiempo.