CIUDAD DE MÉXICO, 18 de noviembre de 2020.- En el caso del General Salvador Cienfuegos “está de por medio el prestigio de una secretaría fundamental para el Estado mexicano, que es la Secretaría de la Defensa, y no es cualquier cosa. No podemos permitir que sin elementos se socaven nuestras instituciones fundamentales”, aseguró el presidente Andrés Manuel López Obrador.

En su conferencia en Palacio Nacional, López Obrador señaló que si la Fiscalía encuentra que hay culpabilidad se castigará, y reiteró que la conducta de un militar no debe manchar a toda una institución.

Sin embargo, dijo “no hay impunidad para nadie y al mismo tiempo no se permitirá que se fabriquen delitos. Tiene que haber sustento, pruebas, ninguna persona puede ser víctima de una injusticia”.

Asimismo, aseguró que no hubo presiones por parte de las autoridades mexicanas para se le retiraran los cargos a Cienfuegos para que fuese juzgado en México como aseguró un medio estadounidense.

Asimismo, aseguró que no hubo presiones por parte de las autoridades mexicanas para se le retiraran los cargos a Cienfuegos para que fuese juzgado en México como aseguró un medio estadounidense.

López Obrador aseguró que no hay nada oculto y solo se trata del respeto a la soberanía.

“Nosotros actuamos a partir de principios y lo que se hizo en este caso fue intervenir en materia política, diplomática, para expresar nuestra inconformidad ante un hecho que se presenta y deciden juzgar en EU sin conocimiento de nuestro gobierno, esto va más allá de lo legal. No quiere decir que no sea legal, existe un acuerdo de colaboración suscrito años atrás. En este caso fue violado, nosotros no tuvimos ninguna información”.

Llegará libre

Cienfuegos será traslado a México como ciudadano en libertad, en calidad de ciudadano mexicano repatriado a nuestro país, no viene como un detenido, pero será advertido que tiene una averiguación penal abierta por parte de la Fiscalía General de la República en su contra para ser juzgado, aseguró canciller Marcelo Ebrard.

El canciller reiteró que no era aceptable que se detuviera a Salvador Cienfuegos sin haber advertido al Gobierno mexicano, y puso un ejemplo:

“Vamos a ponernos en el caso opuesto. Vamos a suponer que en México detenemos, la autoridades, a algún alto funcionario. Ahora que vino el administrador de la DEA, vamos a suponer que lo hubiésemos detenido. ¿Qué pensaríamos de qué ocurriría? Habría una repercusión muy, muy seria. Estados Unidos nos diría: ‘Este funcionario me lo regresas o bien, vamos a tener un grave desencuentro’”.

Este miércoles se celebrará una audiencia en Nueva York donde una jueza decidirá si acepta o no la solicitud de desestimar los cargos de narcotráfico y de lavado de dinero contra el exsecretario de la Defensa en EU.

Por: Bajo Palabra