Primer reporte del Presidente de México sobre los jóvenes desaparecidos en Iguala de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) presentó su informe a los padres de los 43 estudiantes desaparecidos. AMLO ofreció un panorama detallado sobre el avance de las investigaciones y las controversias en torno al caso, destacando varios puntos clave.
En su informe, López Obrador subrayó que se ha procesado a 20 militares, incluidos dos generales, por presuntas omisiones y vínculos con la delincuencia organizada. Sin embargo, el presidente enfatizó que hasta el momento no se ha encontrado evidencia que pruebe la participación directa del Ejército en la desaparición de los estudiantes. Esta falta de pruebas directas ha sido un punto central en el debate sobre la implicación militar.
AMLO criticó las recientes campañas y las opiniones que vinculan al Ejército con el caso, sugiriendo que tales acusaciones podrían estar impulsadas por intereses externos. Según el presidente, algunos defensores de derechos humanos y organismos internacionales, como la Organización de Estados Americanos (OEA), han promovido narrativas que involucran al Ejército sin pruebas contundentes, lo cual, en su opinión, responde a agendas políticas más amplias. Además, López Obrador cuestionó la independencia de algunos actores clave en la defensa de los derechos humanos, insinuando que podrían estar alineados con intereses extranjeros que buscan debilitar al Estado mexicano.
El presidente también hizo referencia a la creación de la “verdad histórica” por parte de las autoridades anteriores, la cual ha sido ampliamente desacreditada. Según AMLO, la versión oficial inicial, que afirmaba que los estudiantes habían sido asesinados y sus cuerpos quemados en un basurero en Cocula, fue elaborada a partir de confesiones obtenidas bajo tortura. Esta versión fue refutada por el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), que determinó que dichas confesiones no eran fiables.
A lo largo del caso, la liberación de detenidos, muchos de los cuales habían confesado su participación bajo tortura, ha generado controversia. La liberación de al menos 60 personas implicadas, celebrada por algunos defensores, ha sido objeto de críticas, ya que algunos de estos individuos han confesado posteriormente su participación sin que se haya comprobado tortura. Hasta la fecha, se han liberado 14 detenidos por tortura, seguidos por otros 51 casos amparados en la misma base jurídica, lo que suma un total de 65 liberaciones.
AMLO ha expresado su compromiso de resolver el caso antes de su último informe de gobierno, reiterando su voluntad de descubrir la verdad detrás de la desaparición de los jóvenes. El presidente ha subrayado que su administración continuará con las investigaciones y las búsquedas, y ha rechazado las críticas que sugieren encubrimientos o falta de acción.
La administración de López Obrador también ha enfrentado críticas por su enfoque hacia el Ejército y su manejo del caso Ayotzinapa. AMLO ha defendido su gestión, comparándola con la de su predecesor Felipe Calderón, a quien acusó de incrementar la violencia y depender excesivamente de las agencias estadounidenses. López Obrador destacó que durante su mandato, la tasa de fallecimientos de las fuerzas armadas en enfrentamientos ha disminuido, en contraste con el aumento registrado durante el gobierno de Calderón.
En conclusión, el presidente AMLO ha insistido en que su administración está comprometida con la verdad y la justicia en el caso de los 43 normalistas desaparecidos, a pesar de las críticas y las controversias que han surgido en torno a la investigación.