ACAPULCO, Gro., 20 de marzo de 2024.- La coordinadora del Observatorio de Violencia Hannah Arendt de la Universidad Autónoma de Guerrero (Uagro) Rosa Icela Ojeda Rivera dijo que la llegada de una mujer a la Presidencia de la República es una deuda histórica, ya que los hombres lo han hecho mal y ellas merecen una oportunidad.
Esta miércoles la catedrática y cofundadora del Instituto Internacional de Estudios Políticos Avanzados Ignacio Manuel Altamirano (IEEPA IMA) acudió como invitada al Grupo ACA que sesiona en un salón de hotel Playa Suites y, donde presentó la ponencia Mujeres en la elección de 2024 rumbo a la Presidencia de México.
Ahí, puntualizó sin embargo que las mujeres que están llegando a gobernar no lo hacen con una perspectiva feminista, ni con el respaldo o con un compromiso concreto ante la desigualdad o en la erradicación de las violencias.
La investigadora especializada en temas de género señaló que ninguna de las candidatas a la Presidencia de la República (Claudia Sheinbaum Pardo y Xóchitl Gálvez Ruiz) es feminista, no obstante que dirigen sus discursos a las feministas o buscan interlocución con las mujeres.
Habló de que las mujeres que alcanzan candidaturas son palomeadas por las élites políticas que están controladas por los hombres y de esa manera serán obedientes a un sistema controlado por ellos, y no hay un compromiso concreto con la erradicación de las oligarquías partidarias, pues son las que deciden quiénes representarían a los partidos o las coaliciones.
“Salvo muy honrosas excepciones, las mujeres que son palomeadas, que no provienen de la fuerza de las propias mujeres, las palomean las élites políticas partidarias y pesetas son masculinas, que son quienes toman las decisiones. Las élites van a palomear a quien le represente una mínima garantía de obediencia, pero en un primero momento, esos parecen ser los criterios con que se mueven”, expuso Ojeda Rivera.
Explicó que en toda la estructura social, política, las relaciones familiares han estado diseñadas para que las mujeres carezcan de voz, a partir de las tareas impuestas que las han aislado.
Rosa Icela Ojeda señaló que en el país y en el mundo, el poder está en los hombres y no en las mujeres y añadió que no corresponde a ellas el resolver las múltiples violencias, pues carecen además de de las estructuras institucionales.
“La responsabilidad es mayor para quien tiene mayor poder y todavía, hoy por hoy en este país y en el mundo, el poder está en manos de los hombres”, explicó.
Puso como ejemplo las denuncias de acoso sexual registradas en la Uagro, una institución, que dijo, refleja la misoginia y es resultado de un sistema patriarcal, y por lo cual en el IEEPA IMA donde trabaja se diseñó un protocolo de atención, del que reveló, se ha topado con el sistema.
Dijo que tal protocolo se ha convertido en una herramienta de control y de venganza política, debido a que no ha sido tomado en cuenta que las estructuras excluyen a las mujeres.
En otro tema, reconoció que la reducción presupuestal en la actual administración federal para mantener las políticas públicas y acciones afirmativas ha vulnerado más a las mujeres ante las múltiples violencias.
Por: Quadratín Guerrero